Chapter novela completa Capítulo 109
Capítulo 109
Briar pensó que Melody se habia calmado temporalmente, la observó volver a la habitación, la vio acostarse sin hacer ruido, sin imaginar que todo era una fachada. Una fachada que mostraba una paz engañosa.
Así que más tarde, aprovechando que Briar se habla ido a la empresa, Melody gestionó por sí misma el alta hospitalaria. Se arreglo un poco, limpió sus heridas, se maquilló, y se mostró alarmantemente
serena.
Era como el último brillo de vida antes de morir.
Melody salió con prisa del hospital, compró una torta en el camino a casa y al llegar, limpió y ordenó todo el lugar. Luego cocinó varias delicias y colocó la torta en el centro de la mesa, encendió las velas y se quedó mirando cómo se consumían.
Como si con ellas, se consumiera su propia existencia.
Con la mirada fija en la vela, finalmente murmuró con voz suave, -Hermano, feliz cumpleaños-
Lo siento, no pude acompañarte en tu cumpleaños… y tu vida, se detuvo para siempre a los 27 años.
Melody no lloró. Se sentó y comenzó a comer, luego cortó un pedazo de torta y lo guardó para Eric, sabiendo que él haria un berrinche si se enteraba que se habia perdido el cumpleaños de su tio.
Melody no podía llevarlo a la casa de los Yelamos para Eric; ella ya no podia enfrentar a Briar.
Una vez que lo hiciera, el dolor y el odio incontenibles de lo más profundo de su ser la transformarían en un demonio. Briar, el hombre que habia arruinado su vida, la pesadilla de la que no podía escapar.
Melody estaba atrapada en sus pensamientos, dominada por la tristeza y el dolor. Desde la incredulidad y el shock iniciales hasta los gritos desgarradores, parecía haber agotado toda su fuerza en su lucha y en el intento desesperado de herir a Briar.
Solo en esos momentos de silencio y soledad, la inmensa y detallada marea de sufrimiento la golpeaba con fuerza, dejándola impotente y desesperada, pero peligrosamente en silencio.
Así que así era la verdadera desesperación, no un grito al cielo, sino una quietud mortal.
Melody se enrojeció los ojos, después de haber comido, limpió la mesa intentando sonreír. Pero sus labios pesaban demasiado y, al final, se sentó en el sofá y enterró su rostro en las manos, su cuerpo temblaba como una bestia atrapada, emitiendo un gran dolor y sufrimiento.
Intentara liberar su propia alma.
e momento, Melody pensó en alguien que podría entregarle la torta a Eric. Buscó su teléfono, pero ecordó que se había hecho añicos en la puerta de los Yelamos. Sin ningún medio de comunicación….
Después de un largo silencio, decidió salir. En una tienda de teléfonos de la planta baja, eligió uno al azar y compró una nueva linea. Subió a su casa, busco una tarjeta de presentación y marcó el número.
Después de un momento, del otro lado respondieron. La voz de Thiago sonaba más fría de lo habitual. -¿Quién es?-, preguntó.
Melody tenia mil pensamientos en la cabeza, pero al final dijo: -Thiago, soy yo, Melody-
El nombre de Melody pareció tocar una fibra en la mente de Thiago. Sus ojos se oscurecieron, y
Capitulo 109
preguntó instintivamente, -¿Por qué cambiaste tu número?-
Mi teléfono… se rompió-, explicó Melody con dificultad, frente a la casa de los Yelamos. Tengo un favor que pedirte…-
¿En la puerta de la casa de los Yelamos?
¿Por qué Melody seguía enredada con Briar después de todo lo que había pasado?
Una ira inexplicable se apoderó de Thiago. No debería enfadarse, no era alguien que se dejara llevar
asi….
Pero las palabras que salieron de su boca revelaron su enfado: -Melody, ¿no crees que deberías respetarte un poco? ¿Por qué fuiste a buscar a Briar de nuevo?-