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Capítulo 78

Mientras organizaba los archivos, no paré de llamar a Jonathan, pero all final, el teléfono parecía estar apagado.

En ese momento me alarmé, pero después de preguntarle a Cecilia, ella dijo que Jonathan probablemente había vuelto a casa por unos documentos, así que me apresuré a regresar al apartamento.

“¿Jonathan, estás en casa? ¿Jonathan?”

Las luces estaban apagadas y parecía que nadie habla regresado.

Pero al ver las huellas de zapatos en la sala, estuve segura de que él había estado alll

Me apresuré a entrar en el dormitorio, y una vez adentro, lo encontré inconsciente en la cama, a pesar de mis intentos por despertarlo, no pude hacerlo reaccionar.

Coloqué mi mano en su nariz y al sentir su respiración, me tranquilicé un poco.

Con los recientes problemas en el Grupo Vargas, todo eso me pareció muy sospechoso. Si en ese momento le pasaba algo, seria el fin de la compañía.

Inmediatamente llamé a la ambulancia y luego contacté al personal de la propiedad.

“Soy la esposa de Jonathan, alguien atacó a mi esposo en el complejo, jexijo ver todos los videos de seguridad ahora mismo! La mujer que trajo a casa es la principal sospechosa, si intentan encubrirla, prepárense para enfrentar las consecuencias.”

Esa fue la primera vez que usé mi posición como señora Vargas para amenazar a alguien; la persona del otro lado se disculpó de inmediato y prometió revisar las cámaras de seguridad..

La verdad era que no sabía por qué Jonathan estaba inconsciente, pero el leve aroma a perfume en él, idéntico al de Miriam, me preocupó. Ese era uno de mis perfumes favoritos y justo lo había olido en Miriam al encontrármela en la

empresa.

Cuando llegaron los paramédicos, rápidamente me subi a la ambulancia con ellos.

Después de un examen, el médico confirmó que Jonathan había ingerido una gran cantidad de somniferos.

El médico, mirándome con preocupación, me dijo, “Señora Vargas, he escuchado que su empresa… quizás su esposo

pensó en…

“Eso es imposible, él no es de los que se rinden fácilmente.”

Negué rotundamente la sugerencia del médico. Jonathan nunca ha sido una persona débil o irresponsable.

Con un problema así en el sitio de construcción, él se aseguraria de consolar a las familias de las victimas y buscaria la causa, ¡Suicidarse no era una opción!

El médico asintió y luego me pasó un formulario de consentimiento.

“Ahora necesitamos realizarle un lavado de estómago y posiblemente otras operaciones, necesita firmar aqui.” Al sostener el boligrafo, mis manos temblaron inconscientemente, pero luego de tomar una respiración profunda, pude calmarme

Sabia lo que Jonathan significaba para la familia Vargas y también sabia que no podia dejarlo morir ante mis ojos.

Desde que nos casamos, esa fue la primera vez que firmé algo como su esposa. Inconscientemente intenté tocar mi anillo de matrimonio, el cual ya no estaba, y senti un nudo en la garganta.

Cuando Estrella llamó, el personal ya bbia copiado los videos de seguridad para ella. Como se esperaba, Miriam habla llegado con Jonathan a casa, pero se fue una hora después.

“Iris, ¿deberiamos llamar a la policía? ¿Qué necesitas que encuentre en tu casa?”

“Busca el monitor del joyero, tiene una cámara interna que se activa automáticamente si alguien lo abre.”

En un principio, eso lo habia instalado Cecilia para vigilarme, pero en ese momento, se convirtió en una prueba crucial. Estrella siguió mis instrucciones y abrió el joyero, pero al hacerlo, descubrió que la cámara estaba dañada.

Capitulo 78

“No funciona, la cámara está rota y además, falta la tarjeta de memoria.”

De repente, me di cuenta de una gran falla y le pedi a Estrella que dejara de tocar la cámara.

Si Minam estaba involucrada, podria haberse preparado de antemano sabiendo de la cámara y quizás hasta usar guantes para no dejar huellas.

“Ins, ¿sospechas que fue Miriam? Acabo de revisar las cámaras y ella definitivamente estuvo aqui.

Lo que yo había pensado, Estrella también pudo deducirlo.

En ese momento le pedi que cambiara la contraseña de la puerta de mi casa y que luego regresara.

Mientras tanto, Jonathan ya habia sido sometido al lavado de estómago, pero aún no recuperaba la conciencia.

El médico dijo que también podria haber tomado otros tipos de tranquilizantes, asi que como no había despertado de inmediato, era necesario continuar realizándole análisis.

Una vez que confirmé que sus signos vitales estaban bien, pude respirar aliviada.

Mientras estuviera vivo, no tenia por qué preocuparme, pero por más que él no se despertara, los asuntos del sitio de construcción no podian dejarse sin atender.

El gerente del proyecto me llamó, indicándome que los familiares del difunto ya habian ido a hacer un escándalo con los periodistas, y para mi sorpresa, Oliver habia llegado al lugar incluso antes que yo.

Cuando mirė la transmisión en vivo de los periodistas en internet, note que Oliver estaba impecablemente vestido, incluso parecia que había usado gel en su cabello, listo para enfrentar la situación.

*Señoras y señores, el Grupo Vargas se asegurará de manejar adecuadamente esta situación. El respeto a los difuntos es primordial, y a sus familiares les pido que guarden luto. Yo, Oliver Vargas, en nombre del Grupo Vargas, les haré una promesa, en tres dias, y solo tres días, resolveremos este problema. Si la compañia no puede ofrecer una solución para entonces, yo, Oliver, cubriré los costos de compensación a la familia del difunto de mi propio bolsillo.” Dijo con firmeza, como si hubiera preparado sus palabras con anticipación.

Ese Oliver era hijo de Manuel Vargas, precisamente el que nunca me habia caído bien.

Jonathan siempre pensó que su hermano era una buena persona, al menos no tan calculador, pero en ese momento, senti que mi intuición fue más acertada.

Con el problema en el sitio de construcción, varios gerentes de proyecto del Grupo Vargas estaban alli, ¿y Oliver, un externo, se atrevía a hablar en representación del Grupo Vargas?

Dejé el teléfono a un lado y mi mirada se dirigió hacia Jonathan, quien todavía estaba en coma.

“Una vez que hayamos resuelto esto, podrás dormir todo lo que quieras. Ahora, por favor, ¿Podrías despertarte?”