Sr. Ramos, su multimillonaria esposa quiere el divorcio

Capítulo 738 

Nora rio y alzó las cejas, -Jajaja, sabía que dirías eso. 

Natalie no dijo nada más. Después de cinco minutos, llegaron al set. 

Nora la llevó al camerino. -La protagonista de esta serie es la actriz que ha ganado tres veces la medalla de oro, Lucía Romí. Su rostro es una belleza agresiva, por lo que hay que modificar también algunos detalles de sus prendas. 

Natalie conocía a Lucía. Michela veía a menudo sus series y películas y le gustaba mucho. 

Hacía unos días que no veía a Michela. Quería pedir un autógrafo de Lucía para Michela. Ella se alegraría mucho. 

Nora buscó un rato en el camerino, y cuando vio a Lucía, caminó rápidamente hacia ella y le sonrió: –Señorita Romí, te he encontrado una nueva maquilladora que modifica los vestuarios. Además, ella es la diseñadora de todos los vestuarios de esta serie. 

Lucía estaba descansando con los ojos cerrados. Al oírlo, abrió los ojos y giró la cabeza para 

mirarlas. 

Se sobresaltó al ver a Natalie, ¿Natalie? 

Natalie también se sorprendió, ¿Lucía la conocía? 

-Hola, señorita Romí. Soy tu diseñadora de los vestuarios, Natalie Silva. Espero que nos 

llevemos bien. 

En este momento, Lucía se levantó emocionada para darle la mano, -De verdad eres Natalie, jestás viva! 

Natalie reaccionó, -¿Nos conocíamos antes? 

-¿No te acuerdas de mí? -Lucía mostraba tristeza. 

Natalie asintió, -Eso es, he perdido la memoria… ¿Nos conocimos en Monteflor? 

-Sí, éramos muy amigas. Me ayudaste mucho cuando me metí en el showbiz. 

Natalie recordó que Bryan había dicho que ella había sido agente durante un tiempo. Por lo 

tanto, fue entonces cuando conoció a Lucía. 

-Señorita Romí, vas a filmar dentro de poco. Vamos a ver si hay algo que modificar en los 

vestuarios. 

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-Bien. 

Después de 

que Lucía se cambió, Natalie retocó unos pequeños detalles y luego dejó que la maquilladora siguiera con lo suyo. 

Media hora después, una hermosa joven apareció ante todos. 

Aunque Lucía tenía veintiocho años, su piel estaba en muy buen estado. Llevaba un vaporoso vestido de arena rosa claro, como una flor de loto en ciernes, que era elegante. 

La maquilladora exclamó: -¡Señorita Romí, estás guapísima! ¡Me estoy enamorada de ti! 

Lucía se tapó los labios y sonrió: -Gracias. 

Miró a Natalie, -Espérame aquí, voy a buscarte después del rodaje. 

-Vale. 

Después de 

que Lucía se fue, Natalie tomó asiento y comenzó a modificar los vestuarios que 

había diseñado antes. 

Los colores de los vestuarios eran todos claros, lo que afectaría a la belleza de Lucía. Decidió oscurecer los colores de todos los vestuarios, para que encajaran con Lucía. 

Cuando estaba revisando, de repente, una voz impaciente sonó a su lado. 

-Oye, ¿quién eres? ¿Eres la paparazzi que ha venido a grabarme? 

La voz era arrogante, y Natalie se molestó inconscientemente al oírla. 

Pero en cuanto levantó la vista, ella fue como si hubiera visto una fantasma. 

-¿Natalie López? ¿Qué haces aquí? Estás muerta, ¿no? 

Natalie frunció el ceño y miró hacia esta mujer.