Rómpeme Cúrame y Olvídame novela completa

Capítulo 208 

Pero ahora, al ver a Darío otra vez, al mirar esa cara tan pulida, Leonora sintió un frío en el corazón. 

Le parecía que ya no podía descifrar la expresión de Darío. 

¿Qué tan manchada estaría su alma bajo esa fachada de respetabilidad? 

Darío observó a Leonora, presionada contra su cama, se acercó, extendió la mano y le arrancó un botón de su blusa. 

Leonora temblaba en todo su cuerpo. 

-Sueltame-, le imploró ella. 

Pero Dario no tuvo piedad al arrancarle la ropa, sin importarle los guardaespaldas presentes. Leonora forcejeó débilmente, su cuerpo se erizaba de miedo. 

Dario, con una sonrisa maliciosa, le dijo, -¿Sabes por qué no te he tocado hasta ahora?- 

La despreciaba, la veía como una herramienta, solo para acostarse con otros y obtener los negocios que él queria. Por eso, nunca la había tocado. 

Las lágrimas de Leonora caian en silencio, -Porque alguna vez fui la empleada del club Nú 

Al menos tienes algo de conciencia, no está mal- 

atu 

Dario sonrió satisfecho, acariciando la cara de Leonora, -Porque tu cuerpo ya ha sido desgastad mis socios, Leonora, no me gustan corner sobras- 

Sin levantar un dedo, sólo con unas pocas palabras, podía desgarrarla por completo. 

Los ojos de Leonora se llenaron de sangre, -Pero… el que me pidió que me involucrara con esos socios, también fuiste tú- 

Usó su belleza como arma, la puso al frente, la hizo sufrir. Siempre pensó que Leonora, por él, se 

acostaría con cualquiera. 

Pero nunca consideró que, detrás de su espalda y sin su conocimiento, Leonora había bebido hasta vomitar sangre más de una vez por un trato, solo para que alguien firmara un contrato. 

Ella se cuidó meticulosamente, protegiendo su reputación destrozada, solo para recibir los despiadados insultos de Dario. 

Él separó sus piernas, Leonora lloraba con la voz ronca, -Si te doy asco, no me toques!- 

-Creo que últimamente te has vuelto muy atrevida,-e dijo Dario con un tono burlón. -Estás flirteando con Xavier, y con ese tipo uniformado, no está claro lo que hay entre ustedes, Leonora, ¿has olvidado quién es tu dueño?- 

-Ya renuncié…, lloraba Leonora temblando, -No soy una perra, soy una persona, Dario, ten piedad, ino quiero seguir siendo como un juguete a tu lado!- 

Los guardaespaldas seguían alli, impasibles, y a Dario parecía no importarle que otros vieran a Leonora en ese estado. La despojó de su ropa, la ató de manos y pies, y Leonora, ya sin fuerzas para intentar zafarse, sentia la humillación de ser observada por todos, ¡preferiria morir! 

-Darío, suéltame, ¡no me toques!- 

Sus ojos estaban inyectados en sangre, -Si piensas que salvarme una vez fue gran cosa, ¡puedes 

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Capitulo 208 

quedarte con mi vida!- 

Los ojos de Dario se estrecharon ferozmente, y en el fondo de sus ojos se extendió un sentimiento que hizo temblar a Leonora. 

Él se rio, y aunque su aspecto era imponente, sus palabras eran cortantes, -Leonora, una perra no tiene derecho a poner condiciones conmigo. Gente como tú, si muere, muere, no habría nada que lamentar- 

Como si fuera golpeada por un rayo, su rostro se puso pálido, como si estuviera atrapada en una pesadilla de la que no podía despertar. 

Cuando Dario empezó a violarla, su dolor fue agudo, y Leonora no pudo contener un gemido. 

Sus ojos se nublaron de lágrimas y los sonidos que emitía eran de total desesperación, -Me duele… 

socorro- 

Sus gritos de auxilio, en cambio, complacieron a Daric 

Cuando iba a seguir, su mirada se encontró con unas gotas de sangre en la sábana, y en ese instante, sus ojos se fijaron en la mancha de sangre, sintiéndose como si hubiera encontrado un desastre, ¡incapaz de moverse! 

Con incredulidad, agarró con fuerza el cuello de Leonora, -¿Eres virgen? ¿Qué demonios es esto? 

Los ojos de Leonora estaban vacios, no le respondió, solo miraba a Dario, y esa expresión hizo que é sintiera un escalofrio en la espalda. 

Después, ella sonrió lentamente, como si se estuviera jugando el todo por el todo, y le dijo: 

-Darío, ¿esto es lo que querías?- 

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