Rómpeme Cúrame y Olvídame novela completa

Capítulo 107 

Melody había tenido un sueño larguísimo. 

En ese sueño, ella seguia siendo la Señorita Melody Torres, deslumbrante y de distinguida elegancia, e Igor era su hermano mayor que la adoraba más que a nadie, un tipo con pinta y posición que atraial miradas de admiración por donde pasaba. 

Habian celebrado el cumpleaños de su hermano; ese año Melody cumplía 25 e Igor 27. Los dos hermanos, inseparables, y sus padres gozando de buena salud, formaban un cuadro familiar lleno de alegría y armonía. 

En el sueño, Melody reia a carcajadas, como si quisiera gastar toda la energía de su vida en esa risa. 

Pero al despertar, seguía siendo Melody, solo que se encontraba en una cama de hospital que no reconocía, y al abrir los ojos, todo el calor se disipó como cenizas en el viento. 

La imagen se congeló en el rostro de Igor y luego, desde el centro, empezaron a aparecer grietas finas como si el cristal se estuviera quebrando, poco a poco, despedazando los recuerdos de la gente querida, hasta desintegrarse por completo. 

Melody miró a su alrededor, presa del pánico, en la habitación privada del hospital. Se levantó de golpe de la cama, como si hubiera tenido una pesadilla, pálida y con la mirada perdida. 

Solo había silencio, como si incluso el eco de su propia voz se hubiera tragado. 

Eso le provocó una sensación de soledad abrumadora, como si fuera la única persona que quedaba en el mundo. Melody se abrazó instintivamente, y aunque la aguja de la intravenosa tiraba de la piel de su mano, formando un pequeño bulto, parecía no sentir el dolor y se abrazó con más fuerza desconsolada. Hermano… 

Sus ojos se enrojecieron, pero no salieron lágrimas. Respiraba con dificultad, como si le faltara el aire. 

Su cuerpo sentia un dolor agudo, como si se estuviera desgarrando. Melody deseaba estar inconsciente en ese momento para no tener que soportar esa claridad helada y dolorosa. 

Hasta que Briar entró corriendo por la puerta, encendiendo las luces. -¿Qué estás haciendo?! ¿Te volviste loca?- 

Melody arrancó la aguja de su mano. De inmediato, la sangre comenzó a brotar de aquel pequeño orificio, manchando las sábanas de la cama. 

ero la herida era pequeña y la sangre se detuvo pronto. Como ya no sangraba, Melody ni se molestó en mpiarla y se enfrentó al hombre que tenía adelante. 

Aún tenía ese rostro atractivo y seductor, pero sus ojos reflejaban un alma sacudida por la conmoción y 

el dolor. 

Briar temblaba al hablar. -Melody, tú…- 

¡No me llames por mi nombre!- 

Como si de repente hubiera sacado fuerzas de flaqueza, empujó a Briar y corrió por el pasillo del hospital, como si pudiera retroceder en el tiempo, como si pudiera volver al lugar donde estaba Igor, al principio de todo. 

Hasta que llegó a la morgue del hospital. 

Melody se tambaled, a punto de caer pero se sostuvajcontra la pared mordiéndose los labios con tanta fuerza que protó sangre entre sus dientes 

es 

La puerta de la morque estaba cerrada ¿Qué hacer ahora? Hermano ya estaba encerade fuera de 

su mundo 

Melody miro la cerradura, arrancó uno de sus pendientes, obviando el dolor que producla quitarselo y tiré de él con fuerza hasta hacer brotar sangre de su lébulo rasgado 

Temblorosa, enderezó el pendiente y lo metió en la perradura, respirando hondo… 

Se escuchó un clic suave desde adentro, y Melody abrió la puerta con una luz deslumbrante en sus 

ojos 

Empujó la puerta con todas sus fuerzas y como hacia donde yacía Igor 

Se lanzó hacia adelante con la desesperación de un niño buscando refugio en los brazos de sus padres como un pez a punto de morir de sed que finalmente encuentra el océano como si como si se digera hacia su propio fin.