Chapter Capítulo 2
Capítulo 2
“Odalys, ¿qué significa este acuerdo de divorcio?”
Al escuchar la voz sombría de Gerson, Odalys se despertó por completo: “Lo que dice, literalmente“.
Gerson se rio con desdén: “Antes de ir a trabajar, pasa por mi oficina para recoger esta basura. A las ocho de la noche, quiero verte en la villa con tus cosas y tu equipaje“.
Odalys le devolvió una risa fria: “Gerson, ¿acaso estás…?”
¿Loco? Pero, su voz se detuvo, dándose cuenta de repente del subtexto de su llamada.
“No tienes que preocuparte por la reputación de Noelia como la otra, solo nuestras familias y unos pocos amigos saben de nuestro matrimonio. Para los demás, sigues siendo el buen hombre que soporta la soledad por el éxito de su novia, y ahora que ha llegado tu momento, todos están felices por ti“.
Gerson ya había sido fotografiado la noche anterior llevando a Noelia al hospital. Ese dia Odalys estabal pidiendo el divorcio; si ese acuerdo se hacia público, Noelia estaria marcada como la amante. Después de hablar, ella se dio cuenta de que él ya habia colgado mucho antes: “Ese maldito…”
El hotel donde ella se hospedaba estaba cerca del Grupo Borrego. No tenia prisa, asi que disfrutó tranquilamente su desayuno antes de tomar el metro hacia allá; tras casarse con Gerson, se convirtió en su asistente personal, cumpliendo el deseo de su suegra, se suponía que era una asistente, pero en realidad era más bien una niñera. Normalmente se encargaba de las tres comidas diarias de Gerson y de otras tareas domésticas, era una de esas que cobraban por no hacer nada, sin embargo nadie en la empresa sabia que ella era la esposa de Gerson, la señora del Grupo Borrego.
Pensándolo bien, era bastante triste. Todo el mundo conocia a la amante, pero ella, la esposa legitima, tenía que actuar como si fuera una empleada más, cuando ocasionalmente tomaba el coche de Gerson para ir a la empresa, tenia que bajarse dos cuadras antes para no ser vista.
Después de llegar a la empresa, Odalys encendió el ordenador y comenzó a redactar su carta de renuncia, ya que iba a divorciarse, ese trabajo de niñera que lo tomara otro. Alguien pasó por su lado y exclamó sorprendido: “Secretaria Tovar, ¿vas a renunciar? ¿Acaso tu novio rico te ha propuesto matrimonio?“.
Odalys se tensó al escribir; en una ocasión habia sido vista bajando del coche de Gerson, y le preguntaron si había llegado en el vehiculo del Sr. Borrego. Para no revelar su relación, mintió diciendo que tenia un novio y que era su coche. Al día siguiente, todo el mundo en la empresa hablaba de su supuesto novio rico que tenia el mismo modelo de coche que el Sr. Borrego, nadie sospechaba de Gerson porque todos en el piso treinta y seis sabían que la secretaria Tovar hacia pedidos de comida que el Sr. Borrego nunca tocaba, siempre terminaban en la basura, solo Odalys era lo suficientemente tonta conto para no darse cuenta, y seguia haciendo pedidos de comida, sin faltar ni un día.
En este momento, ella lo negó: “No, hemos terminado“.
“¡Qué desperdicio dejar ir a un partido tan bueno! Si fuera yo, ya estaría llorando a mares“, alguien comentó con simpatia, aunque era dificil saber cuánta de esa simpatia era en realidad felicidad por la desgracia ajena.
Odalys pensó en su partido dorado‘ y dijo con voz ligera pero filosa: “Un hombre que solo es duro de boca, ¿para qué quiero quedarmelo?“.
*¿Es que no es duro en otros lugares?“.
Un tosido incómodo interrumpió la conversación, y todos se giraron para ver a la persona en la puerta de la oficina y al reconocer quién era, se aterrorizaron.
“Sr. Borrego…”
Capitulo 2
Quien habla tosido era el asistente ejecutivo Ulises Cabrera, quien miró a su jefe y dijo: “Durante las horas de trabajo, está prohibido hablar de temas personales, especialmente los de naturaleza sugestiva“.
La mirada de Gerson barrió la sala y finalmente se detuvo en Odalys, sus ojos negros eran profundos y oscuros: “Secretaria Tovar, pase por mi oficina. A todos los que participaron en la charla se les descontará mil, vayan al departamento de finanzas para firmar la multa“.
Todos los presentes se dispersaron rápidamente, pero ella siguió tecleando como si nada hubiera pasado.
En la oficina de Gerson, de estilo minimalista, Odalys entró y lo encontró jugueteando con un documento entre sus dedos, con un aire de desgano, era el acuerdo de divorcio que ella le habia enviado esa misma mañana a la otra casa, ella se plantó frente al escritorio: “Sr. Borrego, digame“.
El hombre levantó la mirada, su rostro inexpresivo no dejaba percibir ni alegria ni enfado, pero su voz se oscurecia con cada palabra: “Un hombre que solo es duro de boca, blen, Secretaria Tovar. ¿De dónde sacaste esa teoria?“.
Odalys apretó los labios y se hizo la desentendida, tendria que haber sido pateada por un burro para entrar en esa conversación. La tensión duró unos segundos, hasta que él dejó el tema y lanzó el acuerdo de divorcio sobre la mesa: “Explicame, ¿qué significa la razón de divorcio que está aqui escrita?“.
Odalys guardo silencio unos instantes, respondiéndole con firmeza: “El significado es literal“.
Lo había escrito muy claro, quien debia entenderlo, lo entendería.
“Matrimonio de tres años sin vida sexual, incapacidad para satisfacer las necesidades básicas de la mujer. sospecha de disfunción sexual en el hombre“, con cada palabra que Gerson pronunciaba, ella sentia que su cuero cabelludo se tensaba un poco más, temia que ese hombre fuera a estrangularla en un arrebato de ira, pero lo que ella habia dicho era un hecho, en tres años de matrimonio, él nunca la habia tocado.
Al llegar a la linea sobre la división de bienes, un frio destello cruzó los ojos del hombre: “Parece que estos tres años como mi asistente no han sido en vano, conoces muy bien mis propiedades. Pero Odalys, ¿de verdad crees que puedes llevarte algo de mi dinero?“.
Odalys ya estaba preparada para irse sin nada, asi que no le importaba. Sin embargo, su actitud indiferente parecia un desafio para Gerson, que extendió su mano de dedos definidos y le agarró la barbilla: “Sin mi, ¿con qué te sustentarás? ¿Con ese salario de cinco mil al mes? No te alcanzará ni para pagar el alquiler, ¿qué tal el collar que llevas al cuello?“.
El tono burlón era evidente, ella inclinó la cabeza intentando liberarse de su agarre, pero no lo logró y el dolor aumento, soportando la molestia, dijo: “Eso es mi asunto, no tienes por qué preocuparte“.
Gerson soltó una carcajada, emitiendo un aura capaz de despedazarla: “¿Ya encontraste a alguien que te reciba?“.
Al ver que ella no respondía, él tomó su silencio como una afirmación. De repente sonrió, sus labios delgados se curvaron en una mueca burlona y soltó su barbilla: “Parece que no te has dado cuenta de algo. no tienes el derecho de decidir sobre el divorcio, aún quedan tres meses en el acuerdo“.
Pero para Odalys eso no hacia ninguna diferencia, en esos tres años él nunca la habia tratado como su esposa, ¿qué más daban los últimos tres meses? Su actitud actual era simplemente porque el divorcio habia sido iniciativa de ella, hiriendo su orgullo y dañando la reputación de Noelia.
¡La vanidad tipica de los hombres! Parecia que el divorcio no iba a concretarse ese día, asi que ella decidió dejar clara su posición: “No importa cuánto tiempo quede, no pienso volver“.
Gerson la miró desde arriba, con desden: “¿Estás tratando de decirme que quieres separarte, eh?“.