Chapter novela completa Capítulo 111
Capitulo 111
Apenas habia terminado de hablar cuando el sonido de la lluvia se intensificó de repente, y en el momento en que la tormenta se desato, el paraguas sobre sus cabezas también temblo ligeramente.
El agua de lluvia resbalaba por la frente empapada de Melody, cayendo sobre su delicado puente nasal y luego goteando desde la punta de su nariz. Ella estaba palida, mirando al hombre que de repente apareció frente a ella.
Al percatarse de que la lluvia se hacia más fuerte, el inclinó el paraguas hacia ella, y la tormenta la sacudió a él directamente.
La sacudió hacia él, hasta que la lluvia los golpeaba sin cesar, y al mirar de nuevo el rostro empapado por la lluvia, era como si en un sueño de medianoche volviera el recuerdo borroso de un joven que le cortaba la respiración.
Mateo habia estado sosteniendo el paraguas por un buen rato, y ya estaba completamente empapado en un lado. Miro a Melody por un momento antes de sonreir con una sonrisa que mostraba unos ojos encantadores, tan hermosos que se podrian describir como-exquisitos. El dijo,
-¿Qué haces bajo la lluvia? ¿Buscandote problemas de nuevo tú misma? Te pones como si a nadie le importara si te mueres-
Resulta que el dolor extremo ya no se siente como tal ataque, y Melody también imitó su sonrisa, -Si, realmente a nadie le importaria si muero-
Mateo chasqueo la lengua y luego tiró de sus hombros hacia adelante, abriendo la puerta del café con la otra mano. La luz, como un agujero quemado en la oscuridad de la noche, iluminó el rostro de Melody con su cálido resplandor amarillo. Solo entonces se dio cuenta de que había sido llevada hasta
un café.
No habia nadie más adentro; claro, en un dia lluvioso nadie saldría especialmente a tomar café.
Mateo se paró junto a la puerta, cerró su paraguas y lo puso en el estante. Luego se quitó la chaqueta y la colgó, y finalmente tomó un control remoto de un lado, encendió la calefacción.
Melody observó sus movimientos cuando de repente se dio cuenta, -¿Ese lugar eres tu…?-
-Soy el dueño-Mateo terminó las palabras restantes en silencio, y luego se arremangó la camisa para acercarse a Melody. Su mirada se detuvo por un momento en el frente de su pecho; su ropa ya estaba empapada, y el agua de lluvia seguía deslizándose por las curvas de su cuerpo.
on una expresión imperturbable, Mateo fue al fondo y sacó una camisa para hombres, luego la dejó en
mostrador, -Si sigues derecho y giras a la izquierda, hay un baño-
Queria decir que alli podia cambiarse.
Melody miró la camisa y dijo en voz baja un gracias.
Luego, ella tomó la camisa y entró al baño, mientras Mateo observaba su espalda erguida durante un buen rato antes de retirar su mirada con una sonrisa significativa.
Cuando Melody salió, estaba pálida. Mateo con habilidad le preparó un moca y con fácilidad hizo un dibujo en la espuma, -Aquí tienes, va por la casa-
-Gracias, dijo Melody nuevamente, y solo después de tomar el café caliente comenzó a recuperarse un poco. Actuando impulsivamente había corrido afuera en medio de la noche, y ahora estaba en el café de alguien más en tal estado, tan lamentable, realmente era vergonzoso.
Capitulo 111
-No hay de qué, pero si quieres pagarme con tu compañia, no me importaría,- Mateo le sonrió con arrogancia. Qué coincidencia, hoy no tengo nadie trabajando el turno de noche y por eso vine a chequear. ¿Qué te pasó para que salieras asi?-
Melody miró el rostro refinado de Mateo y murmuró con suavidad, -¿Este café es solo tuyo?- El gran Sr. Mateo Suárez, ¿qué tendría en la cabeza para tener un café tan modesto y desconocido?
-Si, es solo aburrimiento-
Mateo sacó del mostrador un flan y se acercó a Melody con él, sentándose frente a ella. Afuera, la tormenta rugía, pero adentro el ambiente era cálido y acogedor.
El aire acondicionado atizaba suavemente, calentando poco a poco el interior del café. Melody, tomando su café, finalmente se calmaba, recordando la idea de buscar su muerte que había tenido antes, y se rió de si misma con sarcasmo.